Que la revelación concede la fe y está es el don que reconoce la verdad.
En clase de introducción a la teología el profesor preguntó: ¿Se necesita la fe para hacer teología? Después de un rato dando nuestro aporte surgió la idea real; el mismo profesor se detuvo a clarificar: "La revelación solo puede ser respondida con la fe, el hombre, aunque desconocedor de Dios, tiende a creer al encontrarse con la manifestación y comunicación de Dios".
Dos ejemplos pensé para esta afirmación: el primero es Abraham, que sin conocer al Dios que le hablo, se convirtió en el padre de la fe, él siendo un semita politeísta es escogido para tener esa comunicación con Dios, al tener Abraham esta revelación, le surge la fe, como don abrasivo que lo engancha y le lleva a corresponder con generosidad.
El segundo ejemplo es la Samaritana el en pozo de Sicar, igualmente no creía en Jesús a pesar de tenerlo ahí, podríamos preguntarnos ¿Se le puede revelar Dios a una pagana? Obviamente conocemos la respuesta, Jesús se da a conocer y ella lo reconoce, este reconocimiento solo puede ser dado por la fe misma, es imposible comprender a través de ese diálogo que ese hombre es el Cristo, por eso la sorpresa y alegría de la Samaritana.
Con esto sin duda queda resuelto estos primeros enigmas teológicos, que son sencillos y hasta lógicos pero que van enriqueciendo poco a poco mi formación teórica, espero también ir enriqueciendo como se debe el blog para que una parte de mi crecimiento se vea reflejado en estas líneas.
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